¿Tienes verdadera ansiedad y pánico cuando vuelves al trabajo después de las vacaciones? Se hacen bromas al respecto pero muchas personas lo pasan realmente mal.

No todo es emocional. No todo es simplemente que se está mejor de vacaciones.

Tal vez tu malestar a la vuelta al trabajo esté causado por unos hábitos de vida que consideras sanos, pero que no lo son para ti. Tal vez ese desayuno típico de lunes a viernes te puede estar arruinando la mañana, causándote ansiedad, palpitaciones, sudoración, angustia, desconcentración, agotamiento… no, no es que no quieras que se acaben las vacaciones (que también), es que tal vez esos desayunos o almuerzos no te hacen bien.

Y te preguntarás ¿por qué si, por ejemplo, un desayuno me sienta mal sólo me ocurre al volver de vacaciones y no durante el resto del año? 🤔.

Porque si durante las vacaciones cambias tus hábitos y no lo tomas, y tu organismo se limpia de esas sustancias que le agreden, cuando regresas a ellas la reacción es clara y fuerte, pero si sigues tomando cada día esos ingredientes la reacción disminuye porque tu cuerpo se adapta. Sin embargo, adaptarse no significa que te esté sentando bien, sólo significa que la sintomatología disminuye y tú crees que ya pasó el mal trago de volver al trabajo.

Es importante identificar qué sustancias son esas. Si tienes buena auto escucha tal vez lo veas claro, pero si no, déjate asesorar por un profesional. Eliminar sustancias dañinas para tu cuerpo te puede ayudar a que todo el año te sientas muy bien, sean vacaciones o días laborables.