Hay personas que se sienten muy orgullosas de hacer caca varias veces al día. Y además de que sean cacas voluminosas. Lo relacionan con buena salud intestinal.

Cuando cambian a una dieta más carnívora, con mucha menos fibra, con reducción de vegetales y eliminación de cereales, legumbres, frutos secos y semillas, las heces pasan a ser más pequeñas y escasas y eso les hace pensar que tienen estreñimiento y que algo va mal.

En absoluto, todo lo contrario.

El objetivo del intestino no es fabricar heces sino absorber al máximo y que estés bien nutrida. Cuanto más absorbas y aproveches lo que comes, mejor. Cuanto menos residuo deje tu comida, mejor.

Las heces de una persona que se alimenta básicamente de proteína animal y grasa, son pequeñas y seguramente no diarias, pero eso no se considera estreñimiento, a no ser que cueste expulsarlas (por cierto, hay personas que comen mucha fibra y van cada día al baño y aún así sufren de estreñimiento).

La falta de fibra no es un problema para el intestino. La grasa estimula la bilis, que además de antibacteriana es un excelente lubricante. También tenemos una potente y natural motilidad intestinal y un diafragma que con la respiración moviliza nuestras vísceras. No necesitamos fibra para ir al baño.

La proteína y la grasa apenas dejan residuo. Se hacen líquidas en el intestino delgado y se absorben plenamente. Por eso hay menos volumen en las heces. Las personas con ileostomía o colostomía (llevan bolsita recolectora después de una intervención abdominal) saben muy bien lo de la absorción porque en la bolsa nunca encuentran residuos de carne, ni pescado ni huevos, todo lo que colecta la bolsa son fibras, residuos vegetales o legumbres.  Justo lo que más fermenta y lo que más gases e inflamación produce.

Las heces voluminosas no son sinónimo de salud sino de que mucho de lo que has comido no lo has utilizado.