¿Eres consciente de qué tanta parte de tu vida está regida por tu parte herida?.

Cuando nos unimos a alguien desde el apego y necesidad… o a un trabajo insatisfactorio por miedo a la escasez económica o por miedo a no estar a la altura de algo mejor… a un tipo de alimentación que nos proporciona tapadera a la ansiedad… o a un resignado estilo de vida por falta de confianza en uno mismo....

¿Cuántas cosas en tu vida parten de tus heridas? ¿Te lo has planteado? Creo que reflexionar sobre esto nos puede ayudar mucho a hacer una limpieza de primavera en nuestro interior.